8 abr 2011

Pequeñas pullitas


Hace unas semanas saltaba en los periódicos la noticia de la dimisión del ministro de Defensa alemán, se había descubierto que había plagiado su tesis doctoral, y ante el acoso mediático se vio obligado a dimitir. ¡Qué curioso! ¡Un político dimitiendo!, cómo se nota que este es un país distinto a Alemania, aquí no se conoce ese término (¿verdad, señor Camps?), y mucho menos por haber plagiado la tesis doctoral,(para los de la LOGSE , el trabajo que tienes que entregar para que te den el doctorado en algo), dado que aquí raro es el político que tiene tesis doctoral, de hecho, hay políticos(y no hablo de el concejal de Cultura del pueblo del abuelo, sino de gente ‘mediática’) que no tienen ni una licenciatura , como José Blanco, ministro de Fomento, que pasó del instituto al cargo dentro el PSOE ,o mejor aún, Jaime Mayor Oreja, el ex ministro durante la época de Aznar ,que tampoco tiene ni una triste licenciatura. Raro también es el político que no tiene una licenciatura en derecho, Rubalcaba en Química y Pajin en Sociología, por lo demás, Derecho, Derecho y derecho (al escaño en el Congreso, si es que el que sabe, sabe). Dejemos el tema de los títulos, y volvamos al anuncio de la dimisión del ministro alemán, era el político más valorado del gobierno de Angela Merkel y aun así la presión le ha obligado a dimitir; ¡Pero qué se toman estos alemanes! ¡Si aquí los políticos más detestados no dimiten ni a hostias! Camps ahí sigue, apoyado por todos, empezando por Rajoy, que a ver cuándo pone los cojones en la mesa, que se le están subiendo a las barbas Esperanza Aguirre y Soraya Sáenz de Santamaría, ahí, cogiendo protagonismo. O Carlos Fabra, el quinto Fabra que ocupa el cargo de presidente de la Diputación de Castellón (eso ya parece una empresa familiar), imputado en varios procesos penales, pero ahí sigue, como un campeón. No se podría terminar sin poner el caso más sonado últimamente, Pablo Zalba ,eurodiputado por el PP, pillado en una falsa llamada de soborno y grabado aceptando el soborno para variar una enmienda, uno de los 4 eurodiputados pillados aceptando este soborno, montado por la revista The Sunday Times . Los otros 3 eurodiputados han sido expulsados por sus partidos, y dos de ellos han dimitido (otra vez esa palabra ¿Alguien sabe lo que significa? En la RAE no aparece). El único al que su partido sigue apoyando para que no dimita (¡y sigue saliendo!) es Zalba, al que Rajoy ha dado todo su apoyo (de tanto dejar que se apoyen tiene que estar más cansado el pobre…). Solo pido una cosa, ¡Por Dios (si existe)! ¡Mandémosles a Alemania, a ver si espabilan!

27 mar 2011

El Enorme Poder Del NO-HACER

    Sé que hay un pequeño revolucionario en cada uno de nosotros.
    ¿O acaso conocemos a alguien que esté de acuerdo con el sistema? ¿Conocemos a algún defensor a ultranza del consumismo, de la publicidad o de la telebasura? ¿Sabéis de alguien que apoye con todo su corazón a los gobiernos o a las grandes empresas? ¿Habéis visto a alguna persona en vuestro vecindario entusiasmada con el inicio de una nueva guerra, o saltando de alegría por lo justas que son nuestras leyes? ¿Hay alguien aquí que este feliz de perder su capacidad de pensar y de sentir  su identidad de ser humano para convertirse cada vez más en una máquina de hacer y de consumir dinero?
    No…No creo que nadie quiera ser un Robot, programado para comer, dormir, trabajar y consumir hasta la muerte. Tiene que haber “algo más”… ¿No lo sentís? Allí está siempre cálido y fiel latiendo en el lado izquierdo de nuestro pecho…Todos en mayor o menor medida nos hemos detenido en algún momento a pensar en:
¡Esto no puede seguir así! ¿Cuándo nos volvimos todos locos por voluntaria y libre decisión? ¿Qué hemos hecho con nuestro mundo, en que nos hemos convertido? Sabemos que podemos hacer algo pero ¿qué?
Acto seguido recordamos  “a los poderosos” (“los gobiernos y empresas que dirigen nuestro país”) y todo nuestro “espíritu revolucionario” se desinfla en un instante. Al fin y al cabo solo somos una microscópica ruedecita dentro de una inmensa maquinaría que “ellos” dirigen. “Ellos” son los que moldean el curso de la historia a su antojo, en contra del sentir del 99% de la humanidad.
    Por lo tanto, ¿qué podemos hacer nosotros? La respuesta es tan simple que resulta difícil de creer: NADA. O eso es lo que “los gobernantes” nos quieren hacer creer, que somos tan insignificantes que no podemos cambiar las cosas, que nosotros, la insignificante ruedecilla no puede modificar la inmensa máquina.     
    Por eso NADA es lo que tenemos que hacer, no comprar su publicidad, de dejar de consumir sin tener un control, solo tenemos que dejar que salgan nuestros pequeños revolucionarios. No tenemos que hacer nada en honor al sistema que se vuelve cada vez más frágil ante nuestra capacidad de ser LIBRES.
         Prueba a quitarle UNA SOLA PIEZA a una gigantesca maquinaria….y observa que sucede.

                                                                                                                                  BY:Maria Morales

4 feb 2011

Gaia

¿Qué es Gaia? Esperamos que sea lo primero que os pregunteis al entrar en nuestra página, porque precisamente serán los que nos lean los que le darán la razón para seguir existiendo.
Muchas veces ni nosotros mismos sabemos muy bien cómo responder, o, al menos, cómo empezar a responder. Realmente esta revista tiene un sentido infinito. 
Gaia es la necesidad de comunicar, de pensar diferente, es la búsqueda de soluciones, expresar lo que pensamos, nuestras ambiciones y decepciones frente al mundo, las metas que juntos queremos conseguir y las que vamos dejando atrás, lo que esperamos de la vida y lo que perdemos por cobardía, o por haber arriesgado demasiado.
Queremos gritar al mundo que nosotros también formamos parte de él y especialmente que nos preocupamos por su realidad, a veces inhumana. 
Queremos ayudar, por poco que sea, y conseguir un cambio.
Su definición precisa es diosa de la tierra, para nosotros la diferencia entre las palabras y el silencio.
Podríamos concluir con que el esclarecimiento de Gaia es la libertad de expresión, algo que engancha y a lo que no podemos renunciar, es la necesidad de sentirse vivo, al menos de vez en cuando.